Este pasado domingo 14 de diciembre de 2025, un grupo de socios de nuestro Convivium, junto con unos amigos con quienes coincidimos allí, nos fuimos hasta Alloza (Teruel) a disfrutar de una jornada absolutamente especial.
Llegamos al paraje de la Filadiella, junto a la Balsa de Carrabalá en Alloza, donde Marta Blesa y Javier Gracia (ecoagricultores de ROYAUMA) tienen sus olivos centenarios de la variedad Royal De Alloza (variedad protegida en el proyecto de Slow Food Arca del Gusto). Allí, Xavi Poncelas y Belén Soler, nos sorprendieron al recibirnos con una taza de chocolate con pan recién tostado a la brasa de la panadería San Valero de Alloza. Seguidamente, nos fueron contando su experiencia, no solo como agricultores ecológicos, sino como elaboradores de su propio AOVE en su microalmazara recién inaugurada este septiembre. Aprendimos numerosas curiosidades sobre el comportamiento de los olivos, y las faenas que requieren para su cuidado y buena conservación. Tras las explicaciones de campo, nos tenían preparada una degustación abierta entre oliveras, en la que nos mostraron la diferencia de olor y sabor de un aceite del año anterior, y dos elaboraciones distintas de la misma variedad por dos empresas distintas. Al final de la mañana, fuimos a ver las instalaciones de ROYAUMA, donde nos explicaron todo el proceso desde la llegada de la oliva hasta su zumo embotellado, cuyo final se traduce en los aceites: Royauma Royal de Alloza; y Royauma varietal.
Si hasta aquí, veníamos contentos de haber podido descubrir el trabajo rural de la oliva y la almazara, el Restaurante La Ojinegra volvió a sorprendernos con una comida temática excepcional, como solo ellos saben preparar. Tanto Belén como Xavi, se desvivieron por llevarnos a un ambiente de felicidad culinaria y fraternal a partir de alimentos de temporada, vinculados con el territorio. Desde el pan especial con forma de caracol Slow Food, pasando por los entrantes, hasta el lamín (helado de AOVE con yogur de la quesería de Biota) fuimos disfrutando de un montón de sorpresas y sabores, en una charla entretenida y amigable.
Por último, por la tarde, nos enseñaron la almazara de la cooperativa San Blas de Alloza, viendo cómo se descargaban los remolques cargados de aceitunas, y de ahí acababa saliendo el aceite que comercializa la cooperativa.
Gracias a Belén y Xavi (La Ojinegra de Alloza. Teruel) y a Marta Blesa y Javier Gracia (ecoagricultores de ROYAUMA), junto al personal de la almazara de Alloza, por ofrecernos la posibilidad de disfrutar de esta experiencia.
